Viajeros/as en el tiempo

La mayoría de nosotros tenemos una “mente” con la asombrosa habilidad de hacernos sentir como viajeros en el tiempo. En ocasiones nos arrastra continuamente hasta cualquier tiempo pasado que fue mejor, para restregarnos que la vida que ahora tenemos es decepcionante o se empeña en que revivamos una y otra vez esos momentos duros que nos ocasionaron sufrimiento, o esos en los que fracasamos o en los que no tomamos las decisiones acertadas. Tampoco es extraño que nos veamos empujados hacia el futuro y quedemos atrapados en imágenes de terribles desgracias, donde nos vemos, enfermos y viejos, arruinadas y solas (vamos nada que envidiar a uno de esos dramones de antena 3), hasta el punto que esto nos genera tanta angustia como si esto fuera verdad verdadera y estuviera sucediendo aquí y en este preciso momento.

No parece quedarnos otra solución para poder continuar con nuestras vidas, que tratar de quitarnos todas estas imágenes negativas y pensamientos catastróficos de la cabeza, de la misma forma que me quiero quitar un jersey de lana porque me pica, encontrándonos con el desagradable y decepcionante resultado de que mientras más “no quiero pensar en algo” con más intensidad lo pienso.

Estos problemas u otras dificultades pueden dar lugar a que nos sintamos bloqueados o a que nuestra vida no vaya por donde quisiéramos, a pesar de haber intentado encontrar una solución o de habernos esforzado intensamente.

En estas situaciones, la terapia psicológica, de manos de un profesional adecuado, puede ayudarnos a, “a cambiar el chip” encajar dolor, a encontrar nuestro camino, a ponernos en marcha y a vivir una vida que nos merezca la pena.